No necesito un 14 de febrero para decirte que te quiero, de hecho lo hago siempre que puedo. No necesito un día como este para demostrarte que eres el único por el que realmente muero, aunque a veces no lo parezca. No necesito que me regales una rosa, una caja de bombones o un peluche enorme. No quiero una pancarta que diga que me necesitas o que crees que soy perfecta. Un día como hoy no voy a darte algo que puedo darte otro día cualquiera. Quiero que todos los días sea nuestro San Valentín, quiero que todos los días pienses que soy perfecta para ti, quiero demostrarte que te quiero hora tras hora y que no tengo pensado dejar de hacerlo. Regálame cada día una sonrisa, una mirada, un "buenos días princesa", que es lo típico, lo sé, pero me puedes hacer infinitamente feliz. Di las palabras mágicas y lo dejo todo por ti.
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